La detective Julia Soler conduce al lector por un thriller policiaco en el que no faltan los secretos, el misterio y la acción. En esta historia de incertidumbres, traiciones y muerte, también hay sitio para el amor. La detective nos muestra su lado más humano y se deja llevar por los sentimientos que despierta en ella otro de los protagonistas de la novela. Tranquilos, no os voy a decir quién es para no desvelaros ninguna sorpresa.
He disfrutado de la lectura, creo que este libro de Pilar es muy equilibrado, es decir, no le sobra ni le falta nada. La autora se detiene en descripciones cuidadas y se adentra en los detalles de la trama, en los que se nota que hay un buen trabajo de investigación, cuando es necesario, pero en ningún momento la lectura pierde ritmo o se hace pesada. Además, cuando al final del libro parece que no puede haber ningún giro más, la autora nos vuelve a sorprender con un acontecimiento, que a mí me ha dejado el corazoncillo tocado.
Os animo a que os adentréis en sus páginas y paseéis por las calles de Sevilla, el Monasterio de Poblet en Tarragona, bibliotecas escondidas, laberintos secretos, y mucho más.
También os invito a conocer otras obras de la autora en su página web. Yo, seguro, que en breve empezaré con la lectura del primer libro de la trilogía LA DETECTIVE, MIRADAS DE HUMO, aunque ambos libros son autoconclusivos, estoy segura de que merecerá la pena conocer más la historia de los personajes.
Felicidades, Pilar, incuestionable que has escrito una buena novela.
Olga Prado 